La imagen religiosa es el terreno común en el que convergen los estudios reunidos en este volumen. Lejos de verse como exclusivo patrimonio de los historiadores del arte, el estudio de las imágenes sagradas en el mundo hispánico se plantea aquí en la intersección de dos campos, el artístico y el religioso. Así, sin eludir la dimensión plástica y eventualmente artística de las representaciones, se incorporan también otros puntos de vista, otras metodologías de trabajo sumadas a las tradicionales del historiador del arte que, devolviendo las obras a su contexto ritual, permiten comprender su función estética como una dimensión esencial de su significado histórico.